La Reforma inacabada

Miedo

Recuerdo perfectamente el día exacto en que todo comenzó. Yo era muy jovencita y hasta ese momento nunca noté nada raro a nivel mental que me hiciese sentir mal. Pero ese día, sin saber cómo ni de qué manera, algo en mí hizo clic y se cambiaron las tornas. Que poco sospechaba yo en ese momento que mi vida ya nunca sería igual.

 

Sobre mí se cernió un manto negro que ya siempre me ha acompañado. Alguna vez he logrado apartarlo un poco y me he asomado por esa rendija a mi primera y añorada realidad, aquélla donde no había sufrimiento. Pero el manto volvía a caer y así han ido transcurriendo los años, con idas y venidas a psiquiatras y psicólogos, con medicación y sin medicación, con diagnósticos errados y no muy claros. Una batalla en la que mi enemigo era el MIEDO pero que no conseguía abatir.

 

Hasta que alguien puso en mi camino al Doctor Gadea (siempre te estaré agradecida Cristina) y él puso nombre a lo que me pasaba: trastorno de ansiedad. Era muy difícil determinar exactamente el origen, pero se podía decir que intervenían factores químicos y genéticos.

 

Pero lo más importante que me dijo, y también lo más duro, es que esto me va a acompañar toda la vida. Creo que él sabía perfectamente que me lo tenía que decir porque a partir de ahí empecé poco a poco a aceptarlo. No ha sido fácil, ni siquiera sé si lo he logrado, pero cuento con la ventaja de que ya soy mucho más mayor que cuando comencé y estoy muy cansada de ofrecer resistencia y también por algo que después diré.

 

Y esa ha sido la clave de empezar a encontrarme mejor, aunque necesite de la medicación para ayudarme a sobrellevarlo, pero no me importa porque también me sirve para contrarrestar los síntomas físicos asociados.

 

Hay otra clave más que me está ayudando tanto como la anterior. El Doctor Gadea sabe de primera mano el sufrimiento que arrastramos las personas con trastorno o enfermedad mental y cómo está este tema en la sanidad pública y ha sentido la necesidad de hacer saber que las cosas pueden hacerse de otra forma. Para ello ha creado “La Unión de los Protagonistas “. Con este proyecto él nos está dando las primeras plumas para formar nuestras alas y empezar a volar hacia la libertad, ayudando y siendo ayudados por otras personas con nuestros mismos problemas, nuestros familiares y un ramillete de profesionales que creen en su proyecto y están echando una mano, o las dos ( y más que tuvieran), todo de forma altruista. Tiene que ser muy duro tener que ver a un paciente en 15 minutos en el mejor de los casos e intentar ayudarlo en ese breve lapso de tiempo sabiendo que no lo vas a poder ver de nuevo hasta dentro de tres meses. Por eso los Protagonistas somos las personas con sufrimiento mental pero también los profesionales que entienden que esto ha de cambiar.

 

Hemos formado una especie de familia y desde que estoy en ella, escuchando a otros compañeros, he dado un paso más tan importante como la aceptación y ha sido darme cuenta de que el MIEDO, ese manto negro que me acompaña desde mi juventud, en realidad soy yo. Por eso, aunque lo rechazaba profundamente y quería huir de él, nunca lo he conseguido.

 

Ahora me abrazo entera, empoderada, porque estoy más acompañada que nunca para seguir hacia adelante. Siento no haber tenido las herramientas para darme cuenta antes de todo esto y que mi familia, sobre todo mis padres, hayan sufrido por mi causa sin saber que más hacer para ayudarme. Mi padre ya no está para poder contárselo, pero estoy segura de que lo sabe porque vive dentro de mí. No quiero finalizar sin darle las gracias a mi pareja, que sin necesidad de diagnósticos ha sabido comprenderme y apoyarme siempre.

 

MIEDO, ya no te rechazo, vas a seguir yendo conmigo porque eres una pieza del puzzle que me conforma. Habrá días que me enfadaré contigo y diré que me tienes harta, pero tengo que confesar que gracias a ti he descubierto otras facetas en mi vida que de otro modo no habrían aparecido.

 

Juani

3 de mayo de 2024

30 Comentarios

  1. EVA

    Bravo Juani! Eres una valiente! Lo primero de todo es aceptar lo que tienes y luego integrarlo en tu vida, asi y solo así es como poco a poco irá desapareciendo ya lo verás. Estamos en el camino. Luchamos juntos. ¡VALIENTE!

    Responder
    • Mar

      Enhorabuena Juani,cariño
      Eres muyyyy valiente dando voz a ese miedo!!
      En tu escrito hay tanto amor que absorbe todos los demás elementos
      Gracias Gracias Gracias

      Responder
      • Francisco

        Alberto es un crac aparte de una bellísima persona.

        Responder
      • Rosalia Ruiz Lopez

        Juani desde ese mágico GAM que compartimos me di cuenta de lo buena persona que eres y de tu generosidad ,,Yo voluntariamente tengo muy pocos amigos,me. He quedado solo con los qué de verdad me valoran y comprenden,por eso quiero ser tu amiga,la amiga a la que llamas cuando estás mal y siembre te apoya la amiga que llora contigo que ríe conti
        go.Todo lo que has sufrido no ha conseguido quitarte los tu gran bondad

        Responder
        • Bautista Such Martínez

          Gracias Juani por tu experiencia, como siempre digo en los comentarios siempre aprendo de otros. Nos ha tocado vivir con la enfermedad mental pues hay que seguir pero no sólo los medicamentos nos ayudan sino también herramientas para poder seguir adelante. Muchas gracias por contarla. Un abrazo 🫂 y un beso de tu compañero y amigo Bati.

          Responder
      • Mari el

        Juani , enhorabuena ,por tí
        Alegrandote ,que lo puedes combatir , sigue y verás como desaparece ,sí, desaparece ,con tu empoderamiento ,personal , querer (aceptar), y convatirlo siendo consciente ,con las palabras del Dr Gadea,por cierto un gran profesional y amigo
        El pánico que es mi problema ,me crea la ansiedad con temblores y flojedad
        Estoy más empoderada, y me enfrentó con cautela y con empoderamiento,siendo uno de los básicos y confianza en ti misma ,como lo has hecho ,Juani
        Enhorabuena
        Un gran abrazo

        Responder
      • Merche

        Enhorabuena Juani. Es un relato estupendo y denota tu valentía. Porque los valientes no son los que no tienen miedo, si no los que son capaces de enfrentarse a él. Felicidades. Un abrazo.

        Responder
      • Maria José garcia gonzalez

        Nunca se sabe, lo batiente que puede ser una persona ,hasta que se ven ,vuestros testimonios.Para el resto de personas que están en una situación igual o parecida les estáis haciendo mucho bien.Siempre con el amparo de mi buen amigo .Alberto Gadea.

        Responder
    • Joaquín Vicente Llorens Ribelles

      Muy bonito

      Responder
    • Juani Pastor

      Tú si eres un ejemplo de valentía. Gracias.

      Responder
    • Juani Pastor

      Tú si eres un ejemplo de valentía. Gracias Eva.

      Responder
      • Myriam

        Me has emocionado muchísimo, sólo las personas que hemos padecido estas enfermedades sabemos lo durísimo y frustrante que es querer estar bien y no poder, llegar a entendernos a nosotros mismos ,saber por qué vemos o sentimos el mundo de una manera diferente al resto es muy importante para vencer o apaciguar ese lobo que siempre nos persigue. La pena es que no todo el mundo tiene recursos para ir a buen psicólogo o psiquiatra y la sanidad pública para esto deja mucho que desear. Enhorabuena por tu comentario y para adelante siempre❤️

        Responder
    • Pilar

      Vaya Juani, ése trastorno de ansiedad que en mayor o menor grado sufrimos tanta gente con mejores y peores épocas de la vida debemos afrontarlo como parte de nuestra personalidad y me alegra tanto que tú con la medicación y la ayuda del admirable doctor Gadea estés en ésa aceptación positiva que nos permite afrontar miedos y problemas que a todos nos llegan, pero sin ese manto negro del que finalmente aprendemos a despojarnos. Sé feliz

      Responder
  2. Alberto Gadea Soler

    Enhorabuena Juani! Vuelve a hacerse patente la necesidad de potenciar y validar el saber experiencial a nivel sanitario. Contar con las personas que han vivido o están viviendo estas experiencias de dolor y sufrimiento para poder entenderlas mejor. Por mucho que nos formemos, por mucha experiencia que tengamos los profesionales de Salud Mental, no podemos desmenuzar como una persona que lo ha vivido, en este caso como tú. Y que razón tienes, poner al lado ese miedo. Abordarlo y afrontarlo. El componente perpetuador de la ansiedad es el miedo y con tu testimonio nos proporcionas una maravillosa y magistral lección de como afrontarlo. Muy feliz de que estés en este grupo de personas que luchamos por mejorar y dignificar la Salud Mental. Un abrazo muy fuerte.

    Responder
    • Francisca Pérez Sanchis

      El miedo,es el sentimiento más paralizante de todos,pero recuerdo una frase que dice,más vale equivocarse,que arrepentirse de no haberlo intentado

      Responder
  3. Maria Jesús

    Ohhh Juani, qué bien has descrito tu proceso, un proceso de buceo en tus aguas muy adecuado y necesario para iniciar proceso de sanación: conocerte y aceptarte que no entrar en la inacción.

    Tu actitud ante el miedo ya no es de miedo, primer paso importante, tu lucha ya no es de frente, es al lado, reconociéndolo como parte de ti puedes potenciarlo o debilitarlo con más facilidad.
    Cada emoción tiene su antídoto, en este caso es el Amor y parece que eres un Ser repleto de Amor lo que preconiza un manto más sutil.

    Comprendiéndote, con Amor hacia ti y hacia “ los otros”, aceptando (que también es Amor ) con tu energía… el manto tiene caducidad, un abrazo a ti con “ tu miedo” asfixiado cada vez más por el ❤️
    Gracias por compartir y poder reflexionar contigo, eres poderosa, no lo olvides🌷

    Responder
    • José Luis

      La Ansiedad, y el Miedo que produce, son un lobo temible. Como el que aparece en la foto de la cabecera.
      Lo has descrito con la precisión y casi naturalidad que poseen aquellos que –como tú–le conocen bien y luchan con las armas del Amor y la Aceptación.
      Gracias, Juani, por lo que nos has contado. Un cariñoso abrazo, y mi admiración!

      Responder
  4. María

    Buenas Juani, de los relatos que he leído por aquí, es con el que me he sentido más identificada. Conmigo todavía creo que no han podido acertar con mi enfermedad, con el diagnóstico correcto…pero me ha ayudado leer tu historia. Fuerza!

    Responder
  5. Rafael González Quesada

    Gracias Juani, por tu valentía. Por tu lucha por querer saber, conocer y aceptar a tu enemigo/amigo. Porque si el no podrías estar hoy donde estas. Gracias por tu crecimiento y por dar tanto amor. Eres una mujer fuerte, libre y sabes lo que no quieres. Y como dice la frase de la película CRIADAS Y SEÑORAS

    Tú eres
    BUENA
    Tú eres
    LISTA
    Tú eres
    IMPORTANTE. ❤️

    Responder
    • M. Carmen

      Gracias porque con tu testimonio nos haces ver el miedo de forma más «amable» para plantarle cara. Mi patología también es el miedo, sobretodo el miedo autocreado. Gracias por darme y seguro q a alguien más también nos has dado esperanza.

      Responder
    • Ana Torregrosa

      Hola Juani, soy Ana y yo también sufro de ansiedad generalizada además de depresión así que te entiendo perfectamente cuando hablas del manto negro… Yo he tenido siempre más miedo ante ciertas cosas que el resto de la gente, me ha costado más superarlos y eso me ha hecho sentirme mal conmigo misma. Evidentemente el miedo lo creamos nosotros y la única forma de que se esfume es haciéndole frente. Abrirse a contar nuestras vulnerabilidades y plasmar estas experiencias en negro sobre blanco parece fácil, pero para ello hay que tener mucha valentía, fortaleza y honestidad. Un abrazo muy fuerte!

      Responder
    • Joaqui

      Juani que bonito y que valioso el testimonio. Muy valiente y muy luchadora. Desde que te conocí siempre he pensado que eres una mujer muy sabía y con unos consejos muy útiles. Me gusta mucho eso de tí. Diría que has dado la clave,aceptarnos y querernos como somos, aunque a veces duela, de miedo y cueste. Gracias de corazón ❤️😍

      Responder
  6. José Tomás P. Sogorb

    Gracias Juani!

    Te agradezco tu valentía para compartirnos tu experiencia que puede ayudar a muchas personas que como tú viven en primera persona el sufrimiento.
    Me encanta tu metáfora de las plumas y las alas, al final las alas las tienes que construir tu.
    Que importante es entender que ese miedo de alguna forma eres tú y a la vez tu eres algo más que ese miedo, por eso cuando luchamos frontalmente contra él, éste aumenta.
    No me cansaré de agradeceros vuestros testimonios, son puro oro, además de mostrar una valentía que no todo el mundo tendríamos.

    Un abrazo y seguimos en este proyecto de visibilización y apoyo mutuo.

    Responder
  7. Mónica

    Gracias por contar tu historia Juani.Pedir ayuda y ponerle nombre al «MIEDO» es un acto de valentía que ha cambiado tu realidad y te ha permitido encontrar momentos de bienestar, abrazándolo y viéndolo desde una perspectiva distinta como un aliado, que viene a informarte de que algo no va bien.
    Tu relato es esperanzador para las personas que sufrimos la misma situación, pues has dejado espacio a tus emociones en esa especie de familia que ha creado Alberto, donde el altruismo se convierte en un feedback.Ayudando a los demás también conseguimos ayudarnos a nosotros mismos desde la compasión y el respeto.

    Responder
  8. Cecilia

    Bravo !!!!! Tu relato más claro no puede se y me alegro que hayas logrado salir de esa oscuridad.
    Y comparto contigo, lo de haber encontrado al Dr. Gadea.

    Responder
    • Nati

      Juani, muchas gracias por abrir tu alma y contar cómo te has enfrentado a ese MIEDO que de una forma u otra a la mayoría nos domina en algún momento y que, a veces, se instala en nuestra alma y no nos deja avanzar.
      Eres una persona muy especial y con tu relato nos ayudas a continuar en el camino con esperanza. Siento que juntos/ as lo conseguiremos.

      Responder
  9. Clara Sevila

    Juani, me he sentido tan identificada. Yo sufro ansiedad generalizada y es increíble el poder que tiene, cuando aparece. En mi caso desde niña, con mi perfeccionismo y mi alta sensibilidad, y pérdidas de seres queridos padre, hermana y madre, estoy otra vez remontándome .Aceptarla y acariciarla. Y como dice Alberto, vamos a la raíz , y en mi última consulta hablamos del miedo. Gracias bonita me has dado mucha fuerza. y gracias a la vida al ponernos en el camino a Alberto. Ya que la sanidad pública la parte psicológica es medicar y ……… somos privilegiadas. Un abrazo lleno de vida. Campeona!!!!!

    Responder
  10. José Antonio Martín

    Hola Juani, no te conozco personalmente, pero al nombrarte varios participantes de esta plataforma ahora lo sé…

    Quisiera agradecerte y darte la enhorabuena primeramente por crear tu proyecto “La Unión de los Protagonistas “, del cual estoy seguro que va a ser algo muy valioso de lo que nos vamos a beneficiar muchos, y que ya nos irás contando conforme vaya evolucionando y tomando forma.
    Por otro lado, no me cansaré de agradecerle al Dr. Gadea, ésta oportunidad en forma de comunidad de forma desinteresada y altruista, que nos dá para expresarnos libremente y contar nuestras vivencias, siempre coordinando y acompañandonos con sus sabías palabras de experiencia y veterania invaluables.

    Respecto al testimonio y tema que aquí se trata, lo considero muy importante y crucial, por ser una emoción que nos afecta a todos los humanos: el miedo. El problema surge cuando el miedo se convierte en irracional, paralizante, disfuncional, o en un bloqueo permanente. Lo digo desde mi experiencia personal, habiéndolo experimentado en todas sus formas y variantes, sinceramente creo que daría para varios «capítulos». Hay algún psicólogo que me ha dicho que éste no existe como tal, otros totalmente al contrario, pero lo que si que es cierto, es que el miedo puede llegar a ser tan complejo como realista, especialmente cuando nos encontramos enfrentando lo que se conoce como «miedo al miedo», uno de los casos más devastadores y destructivos a mi modo de ver.

    Creo que no me equivoco al decir que en muchas ocasiones, nos infligimos ese miedo a nosotros mismos, y aunque somos conscientes de ello, a menudo no sabemos cómo manejarlo, así como la situación que nos desborda. En mi caso, soy de los que se «ahogan en un vaso de agua», y he llegado a causarme este miedo a mí mismo como si fuera una forma de castigo, como si me lo mereciera. Este tipo de autocastigo, con el que nos «autoflagelamos», es una situación particular que, aunque no sé si encajaría dentro de alguna categoría del DSM-5, considero que quizá las «etiquetas» podrían ser una guía o referencia para los psiquiatras, pero que cada persona es única y no hay dos iguales en el mundo, y que debe de ser tratada de una manera personalizada.

    Por último, me gustaría reflexionar sobre algo que, aunque son solo interpretaciones, en el contexto de la psicología (o incluso de la filosofía), muchos hacen referencia al miedo, diciendo que podría considerarse lo opuesto al amor, al igual que la ausencia de dolor se podría considerar lo contrario de la felicidad, y es que según en que contexto se englobe, se pudiera tratar así, u otra forma de interpretación.

    Gracias nuevamente por tu valiosa contribución y por abordar este tema tan importante.

    Responder
  11. Maria Jose Fuster

    Querida Juani, tu relato es un testimonio poderoso de resiliencia y crecimiento personal. Aceptar que el miedo y la ansiedad son parte de tu vida es un paso crucial hacia la autorregulación emocional y la autoaceptación, como bien mencionas. Este proceso no solo te fortalece, sino que también te permite explorar nuevas facetas de tu ser. Además, tu participación en este nuestro proyecto, «La Unión de los Protagonistas» resalta la importancia del apoyo social, del sentimiento de pertenencia, del sentido de propósito y del altruismo en la recuperación de la salud mental. Al ayudar a otros, no solo fortalecemos nuestra propia recuperación, sino que también contribuimos a las de los demás, creando una comunidad de apoyo mutuo que es esencial para todos los involucrados, ¡incluido nuestro querido terapeuta! Continúa abrazando cada aspecto de tu vida con esa fortaleza y humanidad que te caracterizan, permitiendo que cada experiencia, incluso el miedo, te enseñe y moldee hacia una versión aún más empoderada de ti misma. Continua porque con tu esfuerzo, nos ayudas a todos en este ya camino sin retorno hacia el empoderamiento y la resiliencia. ¡Mil gracias!

    Responder
  12. Lorena

    Enhorabuena Juani por tu relato. Debo decirte que tienes toda la razón, en 15 minutos cada 3 meses es imposible poder ayudar como nos gustaría y también es muy frustrante para nosotros como profesionales ser conscientes de ello. Gracias por compartir tu experiencia, no me cabe duda que este proceso te ha hecho una persona mucho más fuerte. Un abrazo!

    Responder

Enviar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

También te puede interesar

Soledad

Soledad

Siempre he sido, lo que suele llamarse, un Alma Vieja, o como decía mi yaya, una vieja en el cuerpo de una niña, y eso amigos míos, cuando eres muy pequeña es un poco confuso,...

leer más
Lucha aunque no tengas fuerzas

Lucha aunque no tengas fuerzas

Mi nombre es Eva María Galán y de toda la vida fui una niña especial, me refugiaba en los libros, en escribir, en mi soledad…hasta que un día empezó mi calvario. En el colegio...

leer más
Su dolor también fue mío

Su dolor también fue mío

Aunque intentando no extenderme, voy a narraros algo muy real. Acabé la carrera con 20 años, llena de vida, ilusiones, alegría, como es natural. Había conseguido ser psicóloga,...

leer más

Contacto

contacto

Teléfono

+34 616 852 402

WhatsApp

+34 616 852 402

Email

info@psiquiatraalbertogadea.es

Dirección

Avenida General Marvá, 33, 1º A
03005 – Alicante

Dirección

Ed. Joymar

C/ Marte 1 Oficina 3C,
03501 – Benidorm